LOS ALTOS PIRINEOS POR SABINE
La ascensión del Puerto del Tourmalet al finalizar la jornada y las cimas bañadas de rosa. ¡Soberbio!
Háblanos de tus Altos Pirineos.
Son un descubrimiento en cada momento. Lugares famosos, rincones secretos de encanto insospechado.
¿Cuál es tu lugar favorito?
Me encanta el Pic du Midi. Tomáis el teleférico a La Mongie y, “hop” 10mn después, estáis en la cima. Poco importa el tiempo, la luz o la temporada, siempre es un regalo. La vista sobre la cadena pirenaica es impresionante desde las terrazas panorámicas. Del otro lado, las grandes planicies del sur se extienden y, con buen tiempo, puede verse el principio del Macizo Central.
Para todos aquellos que disfrutan de lo extraordinario, les aconsejo una noche en la cima o una tarde-noche estrellada. Vosotros, las estrellas y nada más. Es mágico.
Tú eres, también, especialista de vacaciones sin los padres. ¿Nos lo puedes explicar?
Igual que los niños, soy muy curiosa y me encanta moverme. Es por eso que organizo sus vacaciones en los Altos Pirineos. Aquí, ellos disfrutan de la naturaleza, juegan a rugby o balonmano, descubren mil actividades (barranquismo, BTT, bosque vertical, rafting...), realizan paseos, construyen cabañas, visitan lugares emblemáticos, participan en juegos de pista… es decir, no se aburren nunca. Prestamos especial atención al entorno y al lugar de vida. Los padres pueden estar tranquilos, sus peques ¡están en buenas manos!
¿Un fin de semana ideal en invierno, es?
Salir al encuentro de los grandes espacios salvajes y preservados de los Altos Pirineos. Lejos de las estaciones de esquí y del gentío, una noche en refugio o casa rural y paseos con raquetas o esquí de travesía. Los guías y acompañantes de los Altos Pirineos conocen los itinerarios como la palma de su mano, y siempre tienen anécdotas que contar.
¿Y los amantes del esquí?
A los entusiastas del esquí no les dejamos de lado. Les aconsejo una semana de esquí safari. Con un forfait multi-dominios y un bello alojamiento en el valle, como campo de base, disfrutarán sin fin de las pistas y por la tarde, apreciarán el ambiente de un pueblo típicamente pirenaico.
¿Tu experiencia más bella en los Altos Pirineos?
Tomar la ruta de los escolares y surcar los Altos Pirineos, de puerto en puerto. La primera vez que pasé el puerto del Tourmalet, fue yendo a Barèges. Un fin de jornada, el sol comenzaba a caer. Llegada a la cima del puerto, las cumbres del macizo del Ardiden, justo en frente, estaban bañadas en rosa... no dura más que unos minutos pero, son de una extrema belleza.